☕️ El negocio del pan (que aplasta a tu panadero de siempre)
Las franquicias low-cost conquistan las esquinas de tu ciudad con café barato, croissants brillantes… y una receta infalible para dejar sin clientela al horno de toda la vida.
En Barcelona, cada vez cuesta más encontrar una panadería de toda la vida. En su lugar, brotan locales de cadenas como 365 Café o Vivari: negocios que combinan panadería, cafetería y diseño moderno, con precios agresivos y horarios amplios.
¿El resultado? Pan a 50 cts, café con leche a 1,20 €, y competencia feroz para el comercio tradicional.
Imagina que llevas tres generaciones haciendo pan. Tienes tu horno, tu clientela fiel, tus masas madres bien mimadas y tus horarios de panadero (los de madrugar cuando todo el mundo duerme).
Y, de pronto, un día, abren un 365 justo al lado. Al mes siguiente, uno de Vivari. Dos por uno. Todo más barato, más bonito, más cómodo.
En dos años, has tenido que cerrar.
Este es el nuevo paisaje urbano en Barcelona. Y no es casualidad. Es un modelo de negocio. Y está cambiando por completo la ciudad.
⏱ Tiempo de lectura: 10 minutos
En el correo de hoy:
☕️ El negocio del pan (que aplasta a tu panadero de siempre)
Los Mercados (últimos 30 días)
El euro que no se frena: ¿orgullo monetario o trampa exportadora?
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🍞 De horno de barrio a franquicia en cada esquina
En 2014, Barcelona tenía 83 locales tipo "panadería-cafetería". En 2024 ya eran más de 300. Un crecimiento del 260%. Y con nombres propios: 365 Obrador, nacida en 1999, y Vivari, que creció de 1 a 86 locales en una década. Junto a ellos, Granier, El Fornet y Santagloria completan el cóctel.
Todos replican el mismo patrón: locales bien situados, abiertos los 365 días del año, con pan recién hecho y zona de degustación. Café, croissant, zumo, bocata caliente. Todo rápido. Todo barato. Todo a mano. Y legalmente inscritos como "obradores", no como bares o restaurantes.
Pero la táctica más agresiva —y efectiva— de estas cadenas es otra: abrir estratégicamente una tienda justo al lado de una panadería de barrio que ya funciona. La idea es sencilla: saturar la zona con precios bajos, absorber al cliente habitual, y dejar a la panadería sin margen para competir. A veces, colocan una tienda en cada esquina de la manzana, generando una presión comercial brutal. Y cuando el horno tradicional baja la persiana… entonces suben los precios.
El truco: precios de derribo, licencias baratas y obradores sin cocina
Este modelo se sostiene en 4 pilares:
Precios agresivos de entrada: barras a 50 cts, menús por 3,40 €. Ganan clientela a base de precios casi imbatibles. Cuando el horno del barrio no aguanta y cierra, suben los precios.
Producción centralizada: masas y productos semi-hechos en obradores grandes. Solo hornean y sirven en local.
Licencias de panadería: eso les permite operar con menos requisitos legales, menos impuestos y pagar salarios más bajos (convenio de panadería, no de hostelería).
Apertura 24/7 o casi: los domingos están abiertos. Los festivos también. Siempre hay café. Siempre hay pan.
El resultado: locales funcionales, llenos, con tickets bajos pero muchas ventas.
🚫 El otro lado: destrucción de obradores, precariedad y vacíos legales
Este modelo no está exento de críticas:
Tácticas de saturación: abrir uno o dos locales junto a una panadería tradicional para absorber clientela.
Dumping encubierto: vender bajo coste para reventar el mercado y eliminar competencia.
Licencias disfrazadas: operan como bares, pero con licencias de obrador. En muchos casos incumplen metros de degustación o venden productos no autorizados (cervezas, menús calientes, etc.).
Condiciones laborales duras: sueldos bajos, horarios intensos, trabajadores en situación vulnerable. En Vivari se han denunciado casos de impagos y contratos irregulares.
Y lo más grave: según el Gremi de Flequers, el 85% de estas franquicias incumple la normativa municipal. Pero las inspecciones llegan tarde o nunca. Y el daño ya está hecho.
🌏 De Asia a Barcelona (y ahora, a toda España)
Este modelo tiene raíces asiáticas. En ciudades como Shanghái o Seúl, los "bakery-cafés" son parte del paisaje urbano. En Barcelona, la familia Ji (de origen chino) trajo la filosofía de precios bajos y horarios largos con Vivari, y la combinó con inversión local y franquiciado rápido.
Y no son los únicos. En otras ciudades están apareciendo clones: Bendita Masa en Madrid, por ejemplo, empieza a replicar el formato.
Los grandes fondos también están atentos. El pan no entiende de crisis. El café tampoco. La rentabilidad está servida.
El futuro del pan está en juego
Este modelo genera beneficios. Mucho volumen. Pero también homogeniza el tejido comercial de las ciudades. Desaparecen los hornos de toda la vida, con su historia, su trato, su receta. Cambiamos cultura por conveniencia.
Barcelona ya lo vive. Y el resto de España podría ser el siguiente tablero.
La pregunta no es si este modelo funciona. Eso está claro. La pregunta es si estamos dispuestos a pagar el coste oculto de un café con croissant por 3,40 €.
📌 Te leemos: ¿hay modelos similares en tu ciudad? ¿Han cerrado panaderías de barrio en tu zona? Comparte tu experiencia respondiendo a este correo.
El euro que no se frena: ¿orgullo monetario o trampa exportadora?
El euro está fuerte. Tan fuerte que algunos ya lo llaman el nuevo franco suizo. En los últimos doce meses, ha subido más de un 12 % frente al dólar, una cifra que haría sonreír a los políticos… y fruncir el ceño a los exportadores.
En apariencia, todo va bien. La inflación está contenida. El BCE ha logrado mantener el equilibrio sin hundir la demanda, y las expectativas del mercado se alinean con una posible bajada de tipos en septiembre. Pero bajo esta calma, hay un dilema de esos que no salen en los titulares pero sacuden fábricas y balances: ¿un euro fuerte es realmente buena noticia?
La respuesta rápida es: depende de dónde estés sentado.
Para el turista europeo en Nueva York, es un festín. Más poder adquisitivo, mejores precios. Para los importadores, también: materias primas más baratas, márgenes más anchos. Incluso para los consumidores, hay respiro: los productos importados —desde electrónica asiática hasta combustibles— se abaratan. Es decir, el euro fuerte enfría la inflación sin necesidad de más ajustes monetarios.
Pero si eres una empresa que exporta —como casi toda la Alemania industrial, buena parte del agro francés o los fabricantes de maquinaria de Italia— la historia cambia. Porque cada punto que gana el euro encarece tus productos fuera de Europa. Tus coches, tus quesos, tus turbinas, todos más caros en los mercados que más importan: Asia, África, América Latina.
Y aquí empieza el dilema del BCE. Si baja los tipos para favorecer el crecimiento, el euro podría debilitarse y mejorar la competitividad exportadora. Pero si la moneda sigue fuerte, atrae inversión de refugio y calma la inflación… a costa de dinamitar las ventas externas. Es el juego del “desequilibrio elegante”.
Lo más irónico es que esta fuerza monetaria no viene por brillantez propia, sino por comparativa: el dólar sufre por déficit crónicos, deuda récord y un clima político enrarecido. El yen está deprimido. Y el yuan, con la desconfianza global sobre China, tampoco seduce. Así, el euro se convierte en el menos imperfecto de los imperfectos. Y eso lo hace subir.
Detrás de este fenómeno, late una pregunta más profunda: ¿quiere Europa ser una potencia exportadora o una economía de consumo interno robusto? Porque con un euro fuerte, se prioriza el segundo modelo… pero Europa aún no lo ha elegido del todo.
📰 Noticias Exprés: Lo Último en un Instante
🤨 Trump amenaza (otra vez) a Powell… pero niega querer cesarlo por ahora. El presidente de EE.UU. ha cuestionado los elevados gastos de la Fed en obras y desliza que podrían justificar una destitución por “fraude”. Aunque dice que no lo planea, “no descarta nada”.
💸 Wallapop, en venta por 600M… y los minoritarios se rebelan. Naver, dueña del 22%, plantea comprar toda la empresa por menos de lo que valía en 2024. El ICO y varios fondos dudan: ¿venta con descuento o regalo injustificado de un futuro unicornio?
📈 Las Bolsas europeas suben y el Ibex recupera los 13.900 puntos. Los mercados pasan página tras la última polémica de Trump con Powell y se centran en resultados empresariales. Wall Street, Asia y Europa cotizan en verde impulsados por buenas cifras y optimismo en IA.
🇪🇺 Bruselas abre expediente a España por bloquear la OPA de BBVA a Sabadell. Asegura que el Gobierno ha vulnerado el derecho comunitario al obstaculizar la fusión con normas "desproporcionadas". La operación sigue adelante, pero se avecina una batalla legal.
🇨🇳 Santander aterriza en Shenzhen para impulsar su negocio en China. El banco abrirá su tercera sucursal en el país asiático, tras Shanghái y Beijing, con el foco puesto en empresas y comercio con Latinoamérica. Reafirma así su apuesta por el mercado chino, donde ya tiene alianzas y participaciones estratégicas.
📈 La inflación de la eurozona sube al 2% en junio. Aunque se mantiene en línea con el objetivo del BCE, en España repunta al 2,3% por carburantes y alimentos, ampliando el diferencial negativo con Europa. La subyacente se estabiliza en el 2,3%, sin cambios.
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Súper interesante, en el País Vasco ocurre algo similar con la franquicia Bertiz, nunca le había dedicado una reflexión profunda al modelo de negocio... Gracias! 👏
Tal vez yo no lo veo desde un punto de vista económico, yo prefiero la calidad sobre los precios, en México eso a pasado con algunas panaderías, pequeñas, sobreviven porque tienen una calidad superior a la del emporio y tal vez si compramos lo más común por ser barato, pero preferimos aquellos productos de mejor calidad para eventos, para consentirnos o simplemente porque nos gusta más el sabor